Hay bares y bares, y yo he estado en todos, y me gustan todos, aunque con matices. O van de mal en peor, o van de bien en mejor y yo no me doy cuenta, o estoy concentrada en otra cosa, o no sé qué me pasa. La cosa es que si pides cuatro cosas se olvidan de dos, y también pasa que sabes de antemano lo que hay en el menú porque viene en forma de pegote reseco en el vaso de la cerveza, o momificado y extendido por el dorso de los pinchos del tenedor. ¿O me estoy equivocando de sitios? ¿En dónde me estoy metiendo?