Pues nada, mañana salgo para completar la última etapa de la Travesía Superconjuntada. Empiezo en Lagos (ya sabéis, donde los hippies y las gaviotas y las esculturas horribles), voy bordeando el acantilado pero sin precipitarme, espero, hasta Praia da Luz, luego por Burgau, Salema y Vila do Bispo, y si todo va bien el lunes me veréis en el Cabo de São Vicente, ya en el fin del mundo después de haberlo cruzado todo todito andando desde Vila Real de Santo Antonio.