viernes, 22 de agosto de 2003

 

Día 3. 4? 5? Setubal, Portugal.

Cosa curiosa, he descubierto que las resacas en Portugal son igualitas que las que se tienen en Espanha. Y yo estoy intentando escribir con una. Y es dificil, y encima sin ñ en el teclado.

Ja! He conseguidio meter una ñ, trasladandola manualmente como símbolo desde Word. No estoy tan mal como pensaba. Pero sí que estoy un pelín resacada.

Anoche decidí cenar en la Festa da Cerveja, todo lo demás siendo tan cutre y horrible por la noche aquí en Setubal, y eso, pues fui a la Festa da Cerveja, un recinto lleno de casetas vendiendo Superbock por metros y platitos de comida y cosas así. En una caseta tenían caracoles y tuve la estúpida idea de cenar un plato de caracoles, bueno, me pusieron los caracoles sobre un plato de plástico todo pingando de caldo y hala, a buscarte la vida, guapa. Rezumando caldo de caracoles por todos lados y muy avergonzada intenté encontrar un sitio libre en una mesa pero la gente me veía venir con el plato de plástico doblado y perdiendo litros de caldo de caracoles y me decían, "Está ocupado, está ocupado!" Finalmente un grupo de gente me dejó sentarme cerca de ellos, pero sólo porque les daba pena porque estaba sola (me dijo un chico todo sorprendido, "Mas, estás sozinha???"), y me senté allí a despachar caldo por toda la mesa y comiendo mis caracoles, que en Portugal tienen un sabor muy raro, como a Fairy, no sé describirlo. Bueno, totalmente avergonzada terminé mis caracoles y el grupo de gente tan simpática, los únicos que no me habían repudiado en todo el recinto, me quitaron la cerveza vacía y me pusieron una llena, y fue la primera de muchas, y era una gente muy agradable, policías de tráfico por más señas, un grupo de policías de tráfico y parejas de policías de tráfico, de Setubal. Y terminé de bares de copas con uno de ellos. No! No me lo ligué! Vosotros siempre pensando lo mismo.

Bueno, lo de anoche ha desbaratado el plan que tenía de ir otra vez a la playa de Troia esta mañana en el barco de las 9.15, pero da igual, ya estoy un poco color gamba en brazos y piernas, así que mejor me quedo en tierra firme, además con esta resaca no me subo yo a un barco. La península de Troia tiene una de las mejores playas que he visto nunca, una playa fantástica, eso sí, el agua está helada e infestada de medusas con forma de empanadilla de atún, pero es bonita bonita la playa. Una extensión enorme de arena, árboles, flores y dunas .... y cuatro inmensas torres de hormigón de los años setenta estropeándolo todo. Ese aspecto de la playa es feísimo y deprimente, peor que la fábrica de cemento que hay cruzando la bahía, pero yo quería ver el complejo este porque yo a mediados de los años ochenta, cuando acababa de salir de la universidad me metí a guía turística, era mi primer trabajo, y me mandaron a otro complejo de la misma empresa en el Algarve (Torralta Alvor) y lo pasé fatal allí, y tenía curiosidad. Pues ha satisfecho todas mis nostalgias y expectativas, el sitio es más feo que una infusión de calzoncillos cagaos (interesante expresión que he pescado en internet, hmmm).

Es la una y cuarto y me tengo que ir otra vez, estoy en un cíber y tengo que recoger ya, tengo que "apanhar" un autobús hacia mi próximo (y último, snif) destino, siempre me quedo sin tiempo. Me gustaría dedicar una horita a leeros a todos, comentaros y eso, pero siempre me tengo que ir corriendo. Desde Sevilla lo haré.

Voy a terminar con un par de avisos que he visto en la pared de bares o restaurantes. Avisos, carteles, letreros, ya sabéis. No he visto ningún equivalente directo en España y me arrancaron unas risitas (cosa no muy dificil).

"Os produtos adquiridos no podem ser devolvidos".

"Proibida a venda e consumo de bebidas alcohólicas a menores de 16 anos e a quem se apresente notoriamente embriagado ou possua anomalia psiquica".

Hasta manhanita!

Etiquetas: Mis Viajes Solitarios

empollado y puesto por Pau 13:37

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